La (buena) vida online de tus hijos depende de ti… #nativosdigitales #ePaternidad
«Las tablets fríen el cerebro de los niños. Los niños están enganchados a Internet. Las redes sociales distraen a nuestros hijos. Los niños ya no duermen bien, ya no saben estudiar. Los niños del siglo XXI no saben relacionarse«.
Todas estas cosas y muchas más se escuchan cada día en relación con el impacto de la tecnología sobre la vida de nuestros iKids. Si bien el resultado es cierto (el mal uso deviene en consecuencias negativas), el punto de partida es modificable y depende de la familia. La relación que nuestros hijos tengan con la tecnología y el mundo online depende en primera medida de nosotros los padres. No de los iKids. De nosotros. De las normas, los límites, la información y la conversación que incorporemos a la vida familiar en cuanto al uso de lo digital.
Pensemos con un poco de empatía. ¿Cómo habrían sido tu infancia o tu adolescencia si hubieran existido Internet, las redes sociales, los móviles, los mensajes por WhatsApp, los videos online, Google? Si no te lo has planteado o no ves ninguna diferencia, vuelve a pensarlo. Si te lo has planteado alguna vez, seguro que te resulta fácil darte cuenta de lo complicado que es crecer en tiempos digitales. Por eso es fundamental entender a nuestros hijos, comprender en qué mundo crecen, qué problemas se encuentran, qué les gusta y cómo podemos ayudar. Hoy lo hacemos repasando los hallazgos de un informe reciente.
Connected Kids By Kaspersky Lab
Justo en medio del verano, Kaspersky Lab presentó las conclusiones del estudio Connected Kids: Growing Up Online. Kaspersky Lab es un grupo de seguridad informática y software que ofrece distintos servicios, incluidos productos y contenidos dedicados a ayudar e informar a las familias sobre cómo contribuir a que sus hijos hagan un uso seguro de lo digital. El estudio, llevado a cabo por iconkids & youth, entrevistó a 3,780 familias con niños de entre 8 y 16 años en siete países, incluida España.
Lo más destacado de esa vida conectada de los iKids, según el informe, es que casi la mitad (44%) confiesa estar casi siempre conectado (en redes sociales, con apps de mensajería, con videojuegos en línea, con webs de entretenimiento).
Para conclusiones como éstas…
- Más de la mitad de los niños dice que no se imagina la vida sin móvil (un 73% de los de entre 14 y 16 años y un 33% entre los que tienen 8-11 años).
- 4 de cada 10 reconocen que les cuesta no tener el teléfono a mano mientras comen o cenan en familia.
- Un 64% de los iKids de entre 14 y 16 años se lleva sus dispositivos a la cama. Ellos mismos reconocen que tener el móvil o la tablet por la noche interfiere con su descanso.
…lo que hacen falta son normas. Normas que tenemos que poner los padres. Es verdad que dar ejemplo ayuda, pero en todo caso, como con todo lo demás, el niño de 16 tendrá unas costumbres diferentes si desde los 6 tiene unas normas muy claras -y unas consecuencias también claras en caso de no cumplimiento).
Para conclusiones como éstas…
- Hasta un 40% de los niños comparte información sensible en redes sociales: dónde están, quiénes son sus padres o a qué se dedican, dónde viven, cómo es su casa, cuál es su colegio…
- Uno de cada 3 iKids miente sobre su edad en Internet. Lo hace el 20% de los que tienen entre 11 y 13 años (para poder crearse un perfil en redes sociales, por ejempo) y uno de cada seis adolescentes de entre 14 y 16.
- El estudio revela que a pesar de la natural inclinación que sienten los adolescentes a pensar que los padres no sabemos nada de nada y menos de tecnología, el 89% reconoce que se fía más de sus padres y de su familia que del resto de personas.
…lo que hace falta es conversación. Hablar con ellos sobre qué se comparte y qué no, qué es intimidad, qué consecuencias tiene mentir o incumplir la ley, cómo pensar e interpretar lo que vemos… Hay que empezar hablar sobre qué se hace y qué no en Internet desde que son pequeños. Todo eso es parte de lo que nosotros podemos enseñarles.
Para conclusiones como éstas…
- Los niños se inician en compras y gasto de dinero online a edades tempranas, antes incluso de lo que los padres creen. Un 31% de ellos ha comprado alguna vez en Internet.
…lo que hace falta es reflexión y firmeza. Porque para que puedan comprar apps necesitan que les demos las claves. Y para que puedan comprar online, necesitan una tarjeta de crédito o que les demos las nuestras. El límite lo ponemos nosotros.
Y, en general, lo mejor es saber para qué se conectan. Eso podremos saberlo con controles parentales, con historial de navegación, con espionaje familiar y desde luego también hablando. Si entendemos por qué les gusta conectarse desde pequeños, podremos ir «dirigiendo» esa vida conectada. Según el estudio:
ConnectedKids by Kaspersky Lab.
Así que normas, conversación y firmeza. Igual que con prácticamente todo lo que tiene que ver con educar a los niños. Nosotros somos los que ponemos un dispositivo en sus manos, los que damos ejemplo y los que determinamos el por qué, el cómo y el cuándo de su infancia tecnológica. Seas partidario de «dejo que haga lo que quiera» o de «no le dejo hacer nada», la relación que tu hij@ tenga con lo digital depende de ti. Para lo bueno y para lo malo.
Bss,
M.
PD. En el informe encontrarás tablas interesantes, entre ellas éstas:
¿Quiénes son sus amigos en redes sociales?
¿En qué se basan los padres para dar a sus hijos un dispositivo?
¿Cómo perciben los iKids el peligro online?
Felicidades por el articulo, como padre y docente, diariamente me enfrento a poder llevar a cabo las pautas para intentar evitar un uso desmedido de los dispositivos digitales y la visualización de contenidos poco útiles.